Desde arriba todo se contempla mejor!
La perspectiva cambia y las cosas que creemos importantes, tal vez no lo son tanto.
Enmedio del bullicio callejero de Tegucigalpa, esta tarde decidí hacer un alto en el camino. Pude contemplar la mano de Dios y su hermosa creación, a pesar de los descuidos del hombre.
Supe que mi vida depende completamente de ese ser superior! Poco valen mis miedos, angustias y preocupaciones; El se encarga de todo!
Un alto en el camino es necesario, para alimentar el alma, oxigenar el cuerpo, despertar los sentidos, abrir los ojos, sentirnos vivos! Saber sobre todo que estamos llamados a trascender!
Fotografía de Irina Orellana
Feliz 2013!! Ya estoy tarde para escribir la primera entrada del año en este blog. Lo sé!
Nos come Febrero y Enero se me fué como agua entre las manos! Y así se va pasando la vida, muchas veces sin percibirlo!
Quiero compartir esta imagen, que es parte del escenario cotidiano en Tegucigalpa.
Me imagino que a muchos les disgusta encontrarse con el "Tren de aseo" en plena hora pico!
Antes yo era una de esas que les pitaba y me quejaba por mi mala suerte. Ahora sólo observo y tomo fotografías, para compartirlas con ustedes, queridos lectores anónimos.
La semana pasada mientras capturaba con mi lente esta foto, pensé que los hombres de naranja, son más dignos que muchos "buenos Hondureños" de traje y corbata! Que no le roban al pueblo, y que realmente, tienen las manos limpias enmedio de tanta suciedad! Me hacen recordar los versos de Alfonso Guillén Zelaya en "Lo Esencial":
"Lo esencial no está en ser poeta, ni artista ni
filósofo.
Lo esencial es que cada uno tenga la dignidad de su trabajo, la
conciencia de su trabajo...
Dentro de los sagrados números de la
naturaleza, ninguna labor bien hecha vale menos, ninguna vale más. Todos
representamos fuerzas capaces de crear. Todos somos algo necesario y valioso en
la marcha del mundo, desde el momento en que entramos a librar la batalla del
porvenir."
Me imagino que el ilustre Guillén Zelaya diría en estos tiempos, que lo esencial para los Hondureños es volver los ojos a Dios, ser más solidarios, y amar a nuestra patria con un amor que nos mueva hacia lo bueno, lo correcto y lo verdadero!